Porque sé que estás ahí,
en cada rincón del mundo
en cada partícula de polvo
en cada gota de lluvia.
Porque sé que estás ahí,
cada mañana te incito
cada minuto te imploro.
Cada hora del día te invoco.
en cada rincón del mundo
en cada partícula de polvo
en cada gota de lluvia.
Porque sé que estás ahí,
cada mañana te incito
cada minuto te imploro.
Cada hora del día te invoco.
Y al llegar la noche,
me despido de ti con la certeza
de encontrarnos de nuevo
un día más.
Kety Morales A
2009. Poesía y música