Aun perdura en mí el día.
Que a la acequia me acerqué.
Buscando sabiduría
En ella bien que lo hallé
Quise beber de su agua.
Tan fresco es su sabor
De ella quedé prendada
De su aroma, y de su olor.
Tiene la Acequia el don
De transformar las palabras.
Transferidas y muy sabias
Por un joven Profesor.
Y pongo por manifiesto
Un Quijote he descubierto
Tal vez por leer a solas
Y no alcancé a descubrir
Tal vez por eso ahora
Cada día, a cada hora
A La acequia yo me asomo
Para poderme instruir
Aquí les cito los nombres
De unos sabios eruditos
Que amenizan la tertulia
Con su buen saber decir.
Don Pedro en la cabecera
Ele Bergón, Abejita de la vega
Mirian, Manuel Tuccitano,
Merche, Antonio Aguilera
Asun, Pancho, Paco Cuesta
Cosmos, Lola y Jan Puerta
Juan Luis, y el señor De La Vega
Y alguno más que se espera
Para beber de esta Acequia
Al igual que servidora
Del Quijote admiradora
Aunque a veces en silencio...
Siempre fiel le seguirá.
“Vale”
Kety Morales Argudo
